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Semilla Negra – Programa 32: Canción africana de altos vuelos

Semilla Negra – Programa 32: Canción africana de altos vuelos
El grupo ghanés de música highlife Yamoah´s Guitar Band.
El grupo ghanés de música highlife Yamoah´s Guitar Band.

Las poderosas y genuinas raíces de las músicas de África no han impedido que sus ritmos sonoros se hayan mezclado con otras corrientes culturales. Ya sean músicas de diferentes zonas del continente o estilos procedentes de regiones del Caribe y de Europa, esta suerte de contaminación cultural hunde sus raíces en los primeros años del pasado siglo XX. Quizá uno de los primeros estilos de música africana que llamó la atención de los colonos y los viajeros europeos en África fue el highlife. Originario de Ghana pero que con el tiempo trascendió las fronteras africanas para ganar una presencia estable en Nigeria, Liberia, Sierra Leona y otros países africanos occidentales de habla inglesa. En la excursión semanal de Semilla Negra, el programa musical del Blog África Vive, vamos a recorrer ahora las raíces del highlife con una selección de sus artistas más importantes.

El grupo ghanés de música highlife Yamoah´s Guitar Band.
El grupo ghanés de música highlife Yamoah´s Guitar Band.

En el highlife se plasma la creciente influencia que los instrumentos musicales modernos tuvieron en África desde las primeras décadas del siglo XX. Guitarra, saxo y trompeta se convirtieron pronto en aliados para los músicos africanos más interesados en actualizar, y en cierto modo renovar, las tradiciones de los pueblos del continente negro. Y también la arquitectura sonora del jazz influyó en el diseño de nuevos conceptos rítmicos, al igual que el acervo latino, sobre todo el folclor negro cubano, con la clave como eje principal, que ya viajaba con frecuencia de un lado al otro del mar Atlántico. Instrumentistas ghaneses como Pat Thomas y George Darko o artistas nigerianos como Victor Abimbola Olaiya, Chief Stephen Osita Osadebe y Victor Uwaifo popularizaron este estilo musical, cuya importancia, valga un ejemplo de fácil comprensión, podría compararse con la influencia que el poderoso rythm´n´blues primigenio norteamericano tuvo en las músicas occidentales contemporáneas a partir del nacimiento del rock.

Protagonista clave de la música highlife en Ghana fue el director, trompetista y flautista Emmanuel Tettey Mensah. Nacido en la capital nacional, Accra, en el año 1919, ya con veintiún años formó su primer conjunto musical para plasmar un nuevo concepto de música popular africana a partir de las influencias que la instrumentación occidental trajo del swing y el bebop. En esta nueva idea de la música highlife también jugaron un papel importante los aromas de percusión metálica procedentes del Caribe, en especial de las steelbands de Trinidad, del son campesino cubano y, en cierto modo, del blues de los campos sureños de Estados Unidos. Con estos ingredientes, más letras en inglés y en las lenguas nativas del oeste africano, Mensah fundó en 1948 el conjunto The Tempos, que en su época se convirtió en el grupo musical más popular en países de África occidental. Y el éxito de esta contagiosa música negra llegó hasta las ciudades de América y Europa. En Londres se empezó a bailar highlife en los ambientes de emigrantes africanos, y en Estados Unidos despertó tanto interés que The Tempos y Emmanuel Mensah llegaron a compartir escenario con la leyenda del jazz Louis Armstrong en una visita a Ghana del músico de Nueva Orleans.

Portada de uno de los discos del ghanés E.T. Mensah
Portada de uno de los discos del ghanés E.T. Mensah

En Nigeria, el otro país africano donde la música highlife prendió en los clubes y en las fiestas populares de las grandes ciudades, el principal protagonista de esa eclosión bailable fue Chief Stephen Osita Osadebe. Nacido en la ciudad de Atani en 1936, este cantante y compositor llegó a entregar más de medio millar de canciones marcadas por la combinación de estilos como el jazz, el calypso y el swing. Miembro de la etnia igbo, Osadebe formó parte de la Empire Rhythm Orchestra y se caracterizó, además, por el contenido social que imprimió a sus composiciones. No obstante, el reinado de Chief Stephen Osita Osadebe y del resto de grandes músicos del highlife nigeriano comenzó a complicarse por los problemas derivados de la guerra civil nigeriana. Y, como ocurrió también en la vecina Ghana, la música highlife terminó por perder la batalla ante la aparición en los años sesenta de la contagiosa música congoleña llamada soukous. No fue hasta la mitad de la década siguiente, finalizada ya la confrontación civil, cuando este estilo musical (que Fela Kuti asumió como punto de partida para el diseño de la música afrobeat) vivió un cierto resurgir con intérpretes como el guitarrista y percusionista nigeriano Prince Nico Mbarga y su orquesta Rocafil Jazz, quienes en 1976 vendieron trece millones de copias de Sweet mother.

Para ambientar la historia emocionante de la música highlife, nuestra selección sonora de esta semana incluye, por supuesto, a Emmanuel Tettey Mensah y a Chief Stephen Osita Osadebe, pero también a artistas de referencia como Nico Mbarga. Precisamente con este superhéroe de la guitarra africana comienza la nueva lista de música de Semilla Negra, con su indiscutible éxito Sweet mother, no en vano está considerado un himno popular de la mejor música africana de todos los tiempos. También brillan en este recorrido por la historia del highlife artistas como el nigeriano Victor Uwaifo al frente del conjunto City Boys y su compatriota trompetista Victor Olaiya.

Ya desde Ghana llegan el guitarrista Alex Konadu y el conjunto Ramblers International con otro imprescidible del highlife, el saxofonista de largo recorrido Jerry Hansen. Completamos la excursión con Kyeremateng Atwede, el conjunto de guitarras liderado por Akwasi Yeboah y el emperador Teddy Obinna, entre otros, antes de concluir con el que quizá sea el proyecto basado en la música highlife más conocido fuera de África, el conjunto Osibisa liderado por el saxofonista Teddy Osei, que a partir de su fundación en Londres en 1971 entregó ese año el tema Beautiful seven, del disco Woyaya.

Carlos Fuentes es el autor de Semilla Negra. Periodista y crítico musical, durante las últimas dos décadas ha publicado artículos, entrevistas y reportajes sobre las músicas africanas en periódicos nacionales y en revistas especializadas como Rockdelux o Serie B.

[box type=»info»]Recuerda que puedes leer y escuchar todos los programas de Semilla Negra publicados hasta ahora desde este enlace.[/box]

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2 respuestas

  1. Excelente post! Una merecida reivindicación de una gran música. Y estupenda selección (ese «Ewa» siempre ha sido uno de mis highlifes favoritos)! Saludos,
    iago lópez

    p.s.
    Adjunto el enlace a una entrada que escribí como posible introducción a la música africana a partir de canciones instrumentales (hay una de Osadebe) por si a alguien le interesa echarle una ojeada: http://wp.me/p2laAR-bN

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