Noni Jabavu fue la primera mujer sudafricana negra en publicar memorias y una de las primeras mujeres africanas en estudiar una carrera literaria en el extranjero. Dejó el país siendo adolescente para conseguir una educación, y volvía intermitentemente a lo largo de su vida. Regresó a Sudáfrica en 1977 para investigar la biografía de su padre. Algunos de sus trabajos más reconocidos fueron columnas ingeniosas, profundas y políticamente cargadas que escribió para el periódico Daily Dispatch. Pero esta figura pionera fue prácticamente olvidada hasta que el escritor y académico Makhosazana Xaba y el historiador Athambile Masola centraron su atención en su vida y trabajo. Ahora han publicado un libro de las columnas de Jabavu, titulado Noni Jabavu: A Stranger at Home. Le hemos preguntado a Masola sobre la escritora.
¿Quién fue Noni Jabavu?
Noni Jabavu nació en 1919 en Alice, la por entonces provincia de Cape de Sudáfrica. Sudáfrica se había convertido en la Unión de Sudáfrica en 1910, y el devastador Native Land Act fue aceptado en 1913, lo que exacerbó el desplazamiento de africanos en la región. Ella era la hija mayor de Florence Thandiswa Jabavu (nacida Makiwane) y de Don Davidson Tengo Jabavu. Su madre era una de las pioneras de los grupos de autoayuda Zenzele para mujeres en áreas rurales. Sus padres fueron figuras prominentes que usualmente aparecían en periódicos y en plataformas públicas.
Su padre fue un político, escritor y académico en el Colegio Fort Hare (la actual Universidad de Fort Hare). El colegio fue extremadamente importante como un espacio para pensadores negros y líderes africanos. Ella viene de una red de familias que fueron las pioneras en modernidad africana a través de sus enlaces en Lovedale, Healdtown, Fort Hare y viajes al extranjero. Estos primeros intelectuales, profesores y periodistas dieron forma al intercambio cultural como primeros receptores de educación misionera, mientras que conservaban sus tradiciones africanas.
Dejó Sudáfrica a los 13 años para ir al Mount School, un internado de niñas en York, Inglaterra. Ella escribe sobre su partida en sus columnas, donde conoce a Jan Smuts, a quien describe como “Oom Jan”. Es en su casa donde conoce a Arthur Gillet y a Margaret Clarke, quienes serían sus tutores mientras que ella está en el extranjero. En sus columnas explica que su familia en Inglaterra era “magnates ingleses de clase alta, banqueros, industriales, liberales conservadores”. Se quedó en Inglaterra y estudió aún más, hasta que la Segunda Guerra Mundial interrumpió su educación. Fue también durante este período cuando ella trabajó para la emisora de la BBC. En 1941, se casó con su primer marido y, un año más tarde, dio a luz a su hija, Tembi.
Su carrera literaria comienza mientras estaba en Inglaterra, cuando su primera memoria, Drawn in Colour, fue publicada en 1960. El éxito de esta publicación precipitó su nombramiento como editora de New Strand, una revista literaria publicada en Londres. Esto la convirtió en la primera mujer y persona negra en ocupar este puesto, en 1961. Su nombramiento fue tan significativo que también participó en la revista Ebony. En 1962 se publicó una traducción italiana del libro, demostrando aún más interés por su trabajo. En 1963 se publica su segundo libro de memorias, The Ochre People. A lo largo de su vida, residió en Uganda, Jamaica, Kenia y Zimbabue, entre otros países. En su escritura, ella explica los efectos de su experiencia transnacional en su vida como escritora. Regresó a Sudáfrica en 2002 y murió en 2008, cuando vivía en el Lynette Elliott Frail Care Home, en el este de Londres.
¿Por qué es importante?
La vida de Noni Jabavu es significativa porque fue una escritora pionera tanto en Sudáfrica como en el extranjero durante la década de los 60. Pasó gran parte de su vida adulta atravesando el mundo, formando parte de una red de escritores transnacionales. Terminó una carrera literaria, lo cual no era usual en una mujer en los sesenta. Su carrera inspiró los gustos de Margaret Busby (editora de Daughters of Africa), quien se convirtió en la primera mujer negra en entrar en la industria editorial en Londres. En una de sus visitas a casa para trabajar en la biografía de su padre, Jabavu empezó a escribir para Daily Dispatch. Contribuyó con 49 columnas a Daily Dispatch. Sus lectores eran variados y le manifestaban abiertamente sorprendidos por el descaro y las opiniones directas que presentaba en sus columnas. Les fascinaban particularmente su poco convencional vida amorosa y los amigos que mencionaba en sus columnas. Este fue un período agitado en Sudáfrica con la rebelión estudiantil de 1976 y la muerte de Steve Biko en 1977.
¿Cómo te interesaste por sus columnas?
Ambos estábamos trabajando en proyectos a largo plazo sobre Noni Jabavu. Makhosazana Xaba empezó a trabajar en ella mientras estaba estudiando su Máster en Escritura Creativa en 2006. Yo comencé mi investigación en 2017 y gran parte de ella es posible gracias al trabajo de Makhosazana Xaba. Mucha gente sentía un creciente interés por nuestro trabajo, pero era frustrante que ambas memorias estuvieran agotadas. Parecía que una de las formas de conseguir esto era interesarse en una colección de sus columnas, lo que, con suerte, aseguraría que se diera un renovado interés por su trabajo. Las columnas presentaban también un género diferente a las memorias por las que ella era conocida.
¿De qué habla en sus columnas?
Las columnas de Jabavu presentan una variedad de temas, que van desde el comentario político de los setenta hasta una nostalgia por la vida que se perdió como alguien que había estado viviendo fuera desde que tenía 13 años, cuando se marchó al internado en Inglaterra. Escribe sobre las preocupaciones del día a día de una mujer negra viviendo el apartheid en columnas como “Getting used to colour again” y “The Special Branch Call”. Aborda el absurdo del apartheid de frente. Sus columnas son también peculiares y juguetonas respecto a su vida amorosa, que suscita curiosidad en sus lectores. En “Why I’m not marrying”, ella responde a los lectores que “me piden, desde la amistad y no desde el odio, que les cuente más sobre mi vida amorosa personal, yo respondo. No tengo nada que esconder”.
¿Por qué importan hoy en día sus columnas?
Esta colección es histórica. Jabavu había planeado recopilar este libro ella misma, como le contaba en una carta a sus amistades, pero esto no ocurrió. Estas columnas demuestran que las preocupaciones de Noni Jabavu de los setenta aún son relevantes en la actualidad. Las amistades de su familia con políticos como Jan Smuts y con compañeros ingleses de clase alta complica la forma en la que pensamos sobre nuestra historia y sobre la naturaleza de las amistades y de las relaciones raciales. Su honestidad sobre no querer casarse de nuevo se refleja en las decisiones de muchas mujeres hoy en día, que deciden no casarse y, en lugar de ello, perseguir sus carreras y cultivar amistades.
Presentándola nuevamente a una nueva audiencia, casi cincuenta años después de que sus columnas fueran publicadas, la colección también plantea preguntas a quién se recuerda y por qué. Esta colección es un proyecto restaurador, en respuesta al borrado de la escritura de mujeres negras. Solo uno de los libros de Jabavu se publicó en Sudáfrica, en 1982 (The Ochre People). Es el segundo. Estos huecos en nuestro conocimiento sobre el trabajo intelectual de mujeres negras necesitan ser abordados para lograr dar un mejor sentido de nuestra historia.
Este libro es publicado por NB Publishers.
Artículo redactado por Athambile Masola.
Fue publicado originalmente por The Conversation en inglés el 22 de marzo de 2023 y traducido al español con la colaboración de Casa África. Traducción: Daniela Santana Hernández.